Las afirmaciones son frases positivas que a base de ser repetidas quedan grabadas en nuestra mente inconsciente de tal forma que se transforman en creencias. Sustituyen pensamientos negativos los que nos limitan y no nos dejan progresar, por otros positivos que nos hagan sentirnos mejor y tener una actitud positiva ante la vida.

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Nuestras palabras y nuestros pensamientos y sentimientos son energía y cuando hablamos sentimos o pensamos, estamos creando nuestro destino. Así que tenemos que estar muy atentos a lo que decimos, a lo que pensamos y sentimos, tanto en nuestra relación con los demás, como con nosotros mismos, es muy importante.

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Las afirmaciones positivas deben tener tres elementos básicos:

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• Las afirmaciones positivas deben estar en primera persona, y en presente, usando un lenguaje positivo/afirmativo ej: “Yo estoy sano y fuerte”

• Las afirmaciones deben producirte sentimientos:Las afirmaciones positivas no tendrán efecto en nosotros a no ser que nos generen un sentimiento positivo y las creamos no sólo con la cabeza sino también con el corazón. Solo podemos crear cuando unimos pensamiento y sentimiento.

• Las afirmaciones deben ser ciertas para ti: Es necesario que no tengamos ninguna duda sobre la verdad de nuestras afirmaciones positivas. Si dudamos  nuestras afirmaciones no tendrán el efecto deseado.

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Así, por ejemplo, en lugar de empezar afirmando “tengo una salud de hierro” (si no me lo creo) podemos decirnos “estoy en el camino de tener una salud de hierro”.

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Piensa que eres como un imán y atraes hacia ti todo lo que vibra en la misma frecuencia que tus pensamientos y emociones. Por tanto, al hacer una afirmación positiva, sabremos que es válida si nos sentimos felices, esperanzados, animados.

Una buena técnica cuando empezamos a usar las afirmaciones positivas y dudamos de alguna de ellas es utilizar frases del estilo “estoy en el camino de atraer a mi vida…” o “he decidido que…” o “me emociona pensar/sentir que…”.

Así, por ejemplo, en lugar de empezar afirmando “tengo una salud de hierro” (si no me lo creo) puedo decir “estoy en el camino de tener una salud de hierro”

Para que tus afirmaciones positivas tengan efecto debes ser constante y repetirlas todos los días al menos durante tres o cuatro semanas.